martes, 3 de noviembre de 2015

Breve crónica de un día en el XXI Salón del Manga de Barcelona



El XXI Salón del Manga de Barcelona cerró su puertas el domingo 1 de Noviembre con una nueva cifra récord: 137.000 asistentes. Gracias tal vez a los 10.000 metros cuadrados que se le han añadido este año al ocupar el palacio número 4 (a este paso nos quedaremos sin palacios) en el que se ubicaron tanto expositores, como una enorme exposición sobre Star Wars además de la sala de proyecciones. 

¿Buscas dragones? Porque aquí los tenían todos.


La verdad que esta vez mi visita al salón ha resultado realmente satisfactoria a pesar de los 45 minutos de cola que AnnikaChocoInk (administradora del blog Chocolate Ink) y yo tuvimos que soportar, la cual, me parece justo decir, además de no detenerse en ningún momento estaba organizada de tal modo que ni se hacía pesada ni era molesta. ¡Un punto a favor para los organizadores!

Maqueta de Tokio, con Mazinger Z incluido.


Una vez dentro y tras hacer una corta vuelta de reconocimiento empezamos con las exposiciones: La primera la de Super Mario, que este año cumplía 30 añitos y aún sigue tan, o más, en forma que el primer día. Por allí cerquita también estaba una extensa exposición sobre Studio Kosen y dos de sus buques insignias: Aurora García y Diana Fernández. Ilustraciones de infarto y relatos de fantasía. Habiendo visto esta dos exposiciones nos damos cuenta de cierto detalle. Al haber más espacio los expositores están mejor repartidos y con ello han conseguidos que la exposiciones "respiren" mejor y puedan ser visitadas con más comodidad. ¡Otro punto para los organizadores!

El cantar de Heike: exposición sobre batallas feudales.


Pasamos a la planta superior del palacio 2 donde encontramos el Espacio del Espíritu de Japón. Aquello es pura cultura japonesa en donde tan pronto estás disfrutando de un taller sobre cómo se debe poner un kimono como puede estar paseando por un mini jardín tradicional. Masajes faciales, reiki, sala de té, sala de meditación, etc. Eso sí, si alguna de estas actividades te interesa de verdad has de apuntarte rápido pues las plazas son limitadas, ¡y los asistentes miles!

Shikishi: lámina de arroz donde los autores estampan su  rubrica para los fans


Llega la hora de ir a la zona de restauración pero por el camino, pasando por la Plaza Univers nos encontramos con un concierto ya comenzado. Son White Noise que una vez más lo están dando todo. ¡Anda mira! El equipo de sonido del escenario cada vez es mejor y este año han añadido una pantalla por si hay mucha aglomeración y no ves nada. ¡Hat Trick para los organizadores! 

Andrea Jen no firma, hace pequeñas obras de arte y nosotros pudimos comprobarlo.


Ahora sí, hemos llegado a la zona de restauración que además es la zona de videojuegos. Allí el bullicio es máximo. Es hora punta pero conseguimos hacernos con algo de provisiones, sobretodo con mochis, mochis, mochiiiiiis. Son como una droga. Aprovechamos para observar con detenimiento las 120 botellas de sake que están expuestas. Descubrimos que por la tarde se realiza un taller que incluye cata. Así que a la hora propuesta allí estaremos.

Exposición de sakes.

Hasta 120 botellas de sakes había.

Habiendo recuperado fuerzas continuamos, esta vez hasta el punto más alejado del Palacio 2. Allí las exposiciones tratan sobre las bombas atómicas que fueron arrojadas sobre Hiroshima y Nagasaki. Realmente estremecedor.

En Sputnig Creations tenían unos "amigos" muy curiosos

Unos de los enromes photocalls con jedi en miniatura incluido. La fuerza era grande en él.

Tsueno Sanda dibujando  para sus fans.


Palacio 4, los 10.000 metros cuadrados añadidos este año. Gran parte repartida entre la sala de proyecciones que estaba a tope y la tremenda exposición Star Wars Japan, con dos photocalls enormes y con Tsueno Sanda, el ilustrador oficial en Japón, dibujando como si no hubiera un mañana y haciendo tremendamente felices a sus fans. 10.000 metros cuadrados  es mucho espacio y nos dio la sensación de que esta zona estaba algo, solamente algo, "deshabitada" de expositores.

Taller sobre té.

El té bebido está bueno, en galleta es un manjar.

Taller y cata de sakes.


Llega la tarde más rapido de lo que esperabamos. Aquí el tiempo vuela, se mueve diferente, avanza con una velocidad endiablada. Tras meter las narices un ratito entre mangas y merchandising nos encaminamos a la zona de taller de comida japonesas y de la mano de Comer Japonés.com disfrutamos de un taller sobre el té impartido por Yoko Yakushiji de The Matcha House al que luego le sigue uno sobre sakes explicado por Roger Ortuño. Tan reveladores como interesantes. Cuando acaban apenas quedan 20 minutos para que el XXI Salón del Manga cierre sus puertas, así que sólo queda recoger y esperar al año que viene.

1 comentario:

  1. Me encanta!! Este año estuvo genial el Salón y tu crónica lo resume muy bien!

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